«La oración es la respiración del alma». La alegría del cristiano
Muy oportuna la cita de Santo Tomás Moro: «Felices quienes piensan antes de actuar, y rezan antes de pensar; porque no se turbarán por los imprevistos», precisamente hoy coincidiendo con la noticia de la bendición antigua y secular de los «BAMBINELLI» (fue Pio XII quien comenzó a hacerlo), las figuritas del niño Jesús que los romanos suelen llevar hasta la plaza de San Pedro en vísperas de Navidad.
Son de añorar –auténtica nostalgia tenemos muchos de nosotros de los «maestros»- quienes año tras año nos recordaban asimismo el Nacimiento de Jesús y nos animaban a la realización de belenes así como a pintar la Natividad para nuestros padres, familiares o amigos durante las actividades escolares, además de enseñarnos muchos villancicos. Con ese motivo el Papa Francisco en la Plaza de San Pedro del Vaticano ayer dió la sorpresa regalando a todos los niños un pequeño libro de oraciones relacionándolo con el juego que representa hacer un belén o nacimiento, recordándoles no sólo a ellos sino a todos, cristianos, fieles o no: «la oración es la respiración del alma», «es importante encontrar momentos en la jornada para abrir el corazón a Dios».
En su catequesis de cada domingo nos invitó a reflexionar sobre la alegría: «no se ha escuchado jamás de un santo triste y con la cara fúnebre, porque sería una contradicción», «la alegría que el cristiano está llamado a vivir y testimoniar es la que viene de la cercanía a Dios, de su presencia en nuestra vida».
¡¡¡Feliz Navidad¡¡¡